Protege tu cabello, después de lavarlo.

El secado al aire puede que no sea tan beneficioso, ya que mantener húmedo el cuero cabelludo puede propiciar la aparición de bacterias y hongos, debilitando la fibra capilar.

El cabello mojado puede ser sensible al daño debido a cambios físicos y químicos que ocurren cuando entra en contacto con el agua. Lavar el cabello es esencial para mantenerlo limpio, pero debemos saber como tratarlo para mantenerlo en un óptimo estado.

El cabello tiene tres capas principales:

1. La cutícula: la capa externa formada por células superpuestas actuando como una barrera protectora. 

2. La corteza: la capa intermedia, esta da fuerza, elasticidad y color al cabello. 

3. La médula: una capa central, presente en algunos tipos de cabello. 

Cuando el cabello entra en contacto con el agua, la cutícula se levanta ligeramente, dejando expuesta la corteza y debilitando la estructura capilar. Esto ocurre por que las moléculas de agua penetran en la fibra capilar, haciendo que sea más propenso a romperse.

Mayor elasticidad, menor resistencia

Al tener el cabello mojado aparte de estar mas debil, este puede estirarse hasta un 30% más que cuando lo tienes seco, por lo tanto si lo peinas bruscamente, hay mas probabilidad que las fibras se rompan debido al exceso de tensión, además la cutícula actúa como una armadura protectora para la corteza, pero cuando esta se levanta por la absorción de agua, el cabello se vuelve más vulnerable a factores externos, entre ellos, el calor, la fricción o productos químicos agresivos como es el pintado del cabello.

Hay que añadir que el agua hace que el cabello pierda algo de su forma y fuerza natural hasta que se seca por completo por lo tanto es más susceptible cuando hay cepillados agresivos o peines con cerdas rígidas que pueden romper las fibras capilares, peinados muy ajustados, uso de accesorios de mala calidad, frotamiento vigoroso del cabello con una toalla, o el uso de secadores o planchas muy calientes.

Como Podemos proteger el cabello mojado

 Usa toallas suaves como la de microfibra o una camiseta de algodón

hazlo de manera suave para eliminar el exceso de agua.

Peina tu cabello suavemente, empieza desde las puntas hacia la raíz, recuerda no hacer tirones bruscos.

Utiliza protectores térmicos. Antes de usar una secadora de pelo usa protectores térmicos estos crean una barrera protectora frente al calor, siempre toma en cuenta que la secadora debe estar en una temperatura templada, evita el calor excesivo,  utiliza un secador en modo frío o tibio para minimizar el daño.

.Un estudio señala que el daño en el cabello se agrava cuando usan temperaturas superiores a 95°C y a una distancia menor de 5 cm.

Adoptar hábitos saludables harán una gran diferencia en la salud y apariencia de tu melena. ¡Cuida tu cabello y dale el amor que merece! tu lo vales.